Hace un rato he visto a una chica que me ha recordado mi época de estudiante universitaria... La joven volvía a casa tras pasar toda la semana estudiando en Murcia. Ella, ajena a lo que le deparará el futuro, arrastraba su maleta como yo lo hice durante unos añitos... Evidentemente para ella no creo que sea divertido tener que hacer el traslado de Murcia a Mazarrón y de Mazarrón a Murcia, menos en el bus. A mí me ha permitido viajar en el tiempo durante unos minutos. ¡Cuántos recuerdos! Lo primero que se me viene a la mente es el típico comentario: "¡qué bien viven los estudiantes!". Por aquel tiempo apenas éramos conscientes de que estábamos viviendo un gran momento en todos los sentidos. Estudiar tiene su dificultad, requiere esfuerzo y sacrificio, pero tiene grandes beneficios. Aprender es maravilloso y más si se trata de algo que te gusta. Quienes hemos tenido la oportunidad de estudiar, sabemos de qué se trata. Cuando inicias una carrera, pones en ella toda la ilusión del mundo. Por norma general eliges algo que te apasiona, lo que hace que esa experiencia pueda ser más llevadera pese a que tenga sus momentos duros. A priori parece que lo difícil es terminar la carrera, pero no, luego viene lo peor de lo peor: acceder al mundo laboral. Una inserción compleja, en primer lugar por la inexperiencia, la cual te lleva a pasar por diferentes pruebas, entre ellas la de ser becari@. Una vez que encuentras tu sitio, te das cuenta de que no es lo que esperabas o que aspiras a algo más. El caso es que nunca estamos conformes con nada y cuando por fin encuentras tu lugar, pasa algo que no puedes controlar (como me pasó a mí). Y encima cuando quieres retomar la situación, te das cuenta de que estamos en crisis económica y que tu formación está bien, pero lo que necesitas en este preciso instante es mucho más que suerte, un milagro... Para concluir me gustaría lanzar un mensaje alentador, siempre tenemos que luchar (antes, durante y después) son las pautas para poder seguir el curso de la vida. No desesperes porque algún día aparecerá nuestro nicho laboral y no lo dejaremos escapar.